Libre
LETRA
Siempre que todo va mal y hay dolor
sólo Él me levanta del lodo
cuando no hay nadie más conmigo
Él se queda, no me deja solo
Es el único que me acompaña
cuando todo lo demás se cae
Él me da la fuerza que me levanta
sabe todo lo que me hace falta
Sólo Tú eres fiel
Sólo Tú me salvas
Sólo tu me haces vivir
Libre, Libre
Y aunque parezca innecesario
pregúntate realmente ¿Que te llena?
no hay nada suficiente en esta tierra
que pueda a tu corazón llenarlo
Sólo con su amor a mi me basta
tiene todo lo que necesito
Mi vida con Él ya no es la misma
Sólo por Él es por quien yo vivo
Sólo Tú eres Rey
Sólo Tú eres Dios
Sólo Tú me haces sentir
Libre, Libre
Sólo Tú eres fiel
Sólo Tú me salvas
Sólo tu me haces vivir
Libre, Libre
NOTAS
Momentos en la vida en los que sintamos soledad no van a faltar nunca. Muchas veces pensamos que siempre habrá alguien con nosotros en cualquier circunstancia.
Y no me refiero a que en X circunstancias alguien no esté contigo físicamente, o que en X circunstancias alguien no esté contigo anímica o emocionalmente. Me refiero a que hay momentos en la vida en los que da igual que alguien esté contigo o te arrope, en ciertos momentos te encuentras solamente tú. Te enfrentas a ti mismo sin escudos ni barreras. Ese momento es cuando tu fragilidad se hace notar y sólo tienes dos alternativas: Negar lo evidente o "preguntarte realmente: ¿Qué te llena?".
El corazón/alma/espíritu del ser humano fue diseñado para llevar dentro algo eterno e infinito. Da igual las personas que te rodeen, los proyectos que emprendas o la casa que tengas. Si Jesucristo no vive en ti, seguirás vacío.
Lo mejor de todo, es que cuando Jesucristo vive en ti, las personas que te rodean, los proyectos que emprendas e incluso la casa en la que vivas, no son eliminadas ni carecen de valor, sino que cobran un sentido distinto y empiezas a verlo todo a través de un prisma que te muestra lo que Jesucristo vino a darnos. LIBERTAD.
Y no me refiero a que en X circunstancias alguien no esté contigo físicamente, o que en X circunstancias alguien no esté contigo anímica o emocionalmente. Me refiero a que hay momentos en la vida en los que da igual que alguien esté contigo o te arrope, en ciertos momentos te encuentras solamente tú. Te enfrentas a ti mismo sin escudos ni barreras. Ese momento es cuando tu fragilidad se hace notar y sólo tienes dos alternativas: Negar lo evidente o "preguntarte realmente: ¿Qué te llena?".
El corazón/alma/espíritu del ser humano fue diseñado para llevar dentro algo eterno e infinito. Da igual las personas que te rodeen, los proyectos que emprendas o la casa que tengas. Si Jesucristo no vive en ti, seguirás vacío.
Lo mejor de todo, es que cuando Jesucristo vive en ti, las personas que te rodean, los proyectos que emprendas e incluso la casa en la que vivas, no son eliminadas ni carecen de valor, sino que cobran un sentido distinto y empiezas a verlo todo a través de un prisma que te muestra lo que Jesucristo vino a darnos. LIBERTAD.